El Club de Esquí COGITIM realizó, del 2 al 4 de marzo, su primera escapada del año para disfrutar de la práctica del deporte blanco. Benasque, un pueblo de Huesca rodeado de las montañas más impresionantes de los Pirineos, fue el destino elegido para disfrutar de la experiencia de deslizarse por las pistas de la estación de esquí de Cerler, que cuenta con uno de los mayores desniveles esquiables de toda la cordillera pirenaica.

 

Por su parte, los “no esquiadores” tuvieron la oportunidad de realizar excursiones extra a algunos de los enclaves más importantes de la zona, como el Monasterio de Obarra, la Catedral Roda de Isabena o el castillo de Ainsa. Igualmente pudieron practicar el esquí de fondo o con requetas y contemplar los deslumbrantes y nevados paisajes que ofrece la Estación de Esquí de Llanos del Hospital, en el corazón del Parque Natural Posets – Maladeta.

 

 También hubo tiempo libre para disfrutar todos juntos de la gastronomía pirenaica y compartir momentos de ocio.